Las películas son una forma excelente de mirar tu mente, prestar atención a tus emociones, y ayudarte a descubrir cuales son tus creencias subconscientes. Cuando reaccionas de forma emocional en una película, es igual que cuando reaccionas con personas en la vida real. Es la misma dinámica: si tienes un asunto con alguien, es una proyección de tu mente. Ver películas es una forma de acelerar la sanación. David Hoffmeister
Hay una dicho que dice: “una imagen vale más que mil palabras“, quizás esa sea la razón por la que las metáforas, o los cuentos, nos ayudan en ocasiones a comprender e integrar determinados conceptos que de otra forma podrían ser más complicados.
Las películas nos entretienen, pero también nos pueden enseñar, mostrar aquello que todavía no hemos sanado y sacar a la superficie lo que mantenemos oculto ayudándonos de esta forma a sanar nuestra mente.
El propósito de esta sección es utilizar las películas como un recurso más de aprendizaje, como un recordatorio de nuestra verdadera identidad. ❤
Temas: Perdón, Dios, Milagros, Despertar, Dolor, Culpa, Confianza, Fe, Jesús, Crisis de fé, Dudas, Ira, Creencias, Competencia.
Género: Drama | Religión
El pastor Dave (David A.R. White) tendrá que lidiar con la dolorosa tragedia de ver su iglesia quemada. (FILMAFFINITY)
A veces lo único que se necesita es una chispa. Algo muy pequeño, pero que se puede convertir en una llama, y si esa llama se esparce, el poder puede ser tan abrumador que transforma todo a su alrededor. God’s not dead.
Esta película es una metáfora del viaje de la mente hacia el despertar al perdonar las ilusiones y recordar la Verdad detrás de ellas.
La mente que se cree separada de Dios, cree estar en competencia con Él, competencia que se manifiesta en forma de nuestra tendencia a ver diferencias, a compararnos, a comparar nuestras creencias, a ver el «fallo» o centrarnos en los defectos de los demás.
Es la lucha entre el ego y Dios. Lucha en la que Dios por supuesto no participa.
Cuando nos centramos en el mundo, nos olvidamos de Dios. Y al olvidarnos de Él, olvidamos quienes somos, lo que nos sume en una profunda crisis de identidad como les sucede a los protagonistas de esta película.
Pero incluso las dudas pueden ser utilizadas por el Espíritu Santo para ir más allá de ellas y acercarte a la Verdad. Dios no tiene miedo de tus dudas, de hecho no necesita ni siquiera que creas en Él. 😉
Las dudas nos conducen a la búsqueda de la Verdad. Nos ayudan a ser humildes y a pedir ayuda.
La mente que se cree separada del Amor se ha olvidado que nos separamos como un sólo Hijo, y que retornaremos como uno sólo. Esto implica, como recuerda la cita de la película que comparto más arriba que «a veces lo único que se necesita es una chispa. Algo muy pequeño, pero que puede convertirse en una llama, y si esa llama se esparce, el poder puede ser tan abrumador que transforma todo a su alrededor«. La mente del Hijo de Dios es una de manera que cuando cualquier fragmento de la misma recuerda, ese recuerdo se extiende a toda la Filiación.
Y el camino de vuelta a esa unidad se resume en esta frase:
Quita todas las paredes y las cortinas para que puedas estar más cerca y amar puramente. Ten principios, pero no los utilices para excluir o para juzgar a los demás. Mantente lejos de los ídolos, especialmente de los que tú fabricaste con tus propios principios. Ten una fe poderosa, pero no juegues a ser poderoso. Shams Tabrizi.
Al ver esta película tenías en mente dos lecciones:
Lección 129 – Más allá de este mundo hay un mundo que deseo.
Lección 182 – Permanecé muy quedo por un instante e irá a mi hogar.
Dice la lección 182:
Este mundo en el que pareces vivir no es tu hogar. Y en algún recodo de tu mente sabes que esto es verdad. El recuerdo que tu hogar sigue rondándote, como si hubiera un lugar que te llamase a regresar, si bien no reconoces la voz, ni lo que esta te recuerda. No obstante, sigues sintiéndote como un extraño aquí, procedente de algún lugar desconocido.
Ese lugar que te llama a regresar es «el mundo que realmente deseo» del que habla la lección 129.
Este mundo en el que pareces vivir no es tu hogar, pero más allá de este mundo hay otro mundo que deseas.
El mundo en el que pareces vivir es un mundo que se describe así:
El mundo que ves es ciertamente despiadado, inestable y cruel, indiferente en lo que a ti respecta, presto a la venganza y lleno de odio inclemente. Da únicamente para más tarde quitar, y te despoja de todo aquello que por un tiempo creíste amar.
En la película el pastor Dave está a punto de perder algo que valora, su iglesia. Algo a lo que le ha otorgado un significado. Ha depositado su fe en un símbolo, un objeto, en la forma, olvidándose del contenido, de la verdad.
Cuando la mente eligió aceptar la idea de la separación, eligió creer en una ilusión de separación sustituyendo el mundo de Dios por su propio mundo de ilusiones. Son esas ilusiones, a las que hemos dotado de significado y valor depositando nuestra fe en ellas, «las paredes y las cortinas» que nos impiden experimentar la Realidad del Amor, el mundo que realmente deseamos.
¿Cómo podría ser una pérdida, entonces, encontrar un mundo en el que es imposible perder, en el que el amor perdura eternamente y en el que el odio no existe y la venganza no tiene sentido? ¿Cómo podrías ser una pérdida hallar todas las cosas que realmente anhelas, y saber que no tienen fin y que perdurarán a través del tiempo exactamente tal como las deseas?
Más allá del mundo de las ilusiones está el inmutable amor de Dios con el que estamos eternamente unidos. Accedemos a él cuando nos detenemos por un instante y pedimos ayuda.
El mundo real es la percepción de nuestra unidad con el amor. Ese es el mundo que realmente deseamos. Tomamos conciencia de ese mundo cuando dejamos de dar valor a las pequeñas cosas del mundo de la separación como le ocurre al pastor en una imagen de la película que es un símbolo de lo que esta lección nos recuerda.
Cierra los ojos al mundo que ves, y en la silenciosa obscuridad contempla cómo unas luces que no son de este mundo se van encendiendo una por una, hasta que deja de ser relevante donde comienza una y donde termina la otra al fundirse todas en una sola.
Reconocerás el símbolo cuando lo veas en la película.
El perdón solo puede suceder cuando me doy cuenta de que realmente lo que estoy viendo es una ilusión. No puedo perdonar aquello que creo que es real. Esto también se ve reflejado en la película.
Son mis propias dudas las que veo reflejadas en el mundo. Es mi propio odio el que observo en el mundo. Es mi propia creencia en la separación la que se manifiesta en forma de diferencias. Es mi deseo de mantenerme separado del amor de Dios la causa de mi sufrimiento, dolor y creencia en la pérdida.
Es mi deseo, por lo tanto, de volver a la conciencia de ese amor lo que puede mostrarme la puerta de entrada a ese otro mundo que deseo donde veo los intereses de mis hermanos como no separados de los míos.
Me gustó el símbolo de la «cruz» como está explicada en la película. En la vertical está nuestra relación con Dios a través del Cristo. En la horizontal es la relación con cada hermano. Me ayudó a entender que realmente la forma de llegar a la conciencia de Cristo es a través de nuestras relaciones especiales. El milagro es un salto de la percepción del tiempo lineal (línea horizontal), hacia la percepción vertical (línea vertical). Es un salto fuera del tiempo al que accedemos a través del perdón de las relaciones especiales que mantenemos. Ese cambio de percepción es el que representa el símbolo de la cruz, el escape del dolor y la muerte, hacia la resurreción, el renacer de la conciencia Crística.
Esta película es ese milagro que lleva fuera del campo de batalla a una nueva percepción.
Permite que esta película te recuerde que más allá de este mundo hay otro mundo que deseas, porque no hay nada en este mundo que pueda aportarte felicidad y paz duraderas.
Pide que ese nuevo mundo te sea revelado hoy.
Hoy las luces del Cielo se inclinan ante ti, para derramar su luz sobre tus párpados mientras descansas más allá del mundo de las tinieblas. He aquí una luz que los ojos no pueden contemplar. Y sin embargo, la mente puede verla claramente, y entender.
Y deja que esta película traiga a tu mente la conciencia de que:
DIOS ES BUENO. TODO EL TIEMPO. TODO EL TIEMPO. DIOS ES BUENO.
(Puedes leer esta otra entrada que escribí acerca de la primera parte de esta película titulada: Dios no está muerto).
Puedes ver el trailer aquí:
Actualmente está en cines, en Madrid al menos.
Que la quietud del Cielo envuelva hoy tu corazón.
Feliz día. ❤
RETO DE LOS 90 DÍAS: INSPIRACIÓN DIARIA PARA EL PERDÓN, LA PAZ Y LOS MILAGROS (INSCRIPCIONES ABIERTAS). (Haz clic en la imagen para acceder a la información)

PRÓXIMAS FECHAS TALLERES ON-LINE (A DISTANCIA) A TRAVÉS DE LA ESCUELA DE LOS MILAGROS:
TALLER: 25 DÍAS PARA LOS MILAGROS. UNA TRAVESÍA DEL MIEDO AL AMOR. (INSCRIPCIONES ABIERTAS. EL TALLER EMPIEZA EL PRIMER JUEVES DE CADA MES)
(haz click en la imagen para ir a la información)
TALLER: 25 DÍAS PARA LOS MILAGROS EN LAS RELACIONES. APRENDER A AMAR Y SER AMADO. (INSCRIPCIONES ABIERTAS. EL TALLER EMPIEZA EL SEGUNDO JUEVES DE CADA MES)
(haz click en la imagen para ir a la información)
TALLER: 25 DÍAS PARA LOS MILAGROS EN LA VERDADERA ABUNDANCIA. DE LA MENTE MILLONARIA A LA MENTE MILAGROSA. (PRÓXIMAMENTE)
(haz click en la imagen para ir a la información)


¿ME AYUDAS A MANTENER ESTE ESPACIO?
Si algo de lo que has leído te ha ayudado, y/o inspirado, y sientes contribuir a que este espacio siga existiendo puedes hacer un donativo en este enlace. Gracias por adelantado, tu generosidad sirve para que pueda seguir escribiendo y compartiendo de forma gratuita. ❤
5,00 €